IT'S A TRAP STUDIO (Space Wars) diciembre 19

Lo+: Que sepan manipular la temática es un logro en mayúsculas en sí mismo.

Lo-: Una prueba en concreto, demasiado alargada.

Adaptar sagas literarias o cinematográficas de cierto éxito es tema peliagudo sin lugar a dudas (vean, si no, Stranger Rooms). Hablar de cine legendario trasladado a escape room convierte el adjetivo en un eufemismo, y deberíamos tratar la osadía de peligroso (podemos tener The Legend o Catacumbas en caras opuestas de la misma moneda). Pero tratar de adaptar Star Wars es una completa locura y lo que para cualquier otra sala pasarían a ser palabras mayores se transforme en un cataclismo de dimensiones galácticas. El equivalente escapista a destruir la estrella de la muerte veinte veces. Las expectativas, la verdad sea dicha, y visto el éxito de las recientes (y no jugadas) Scape Wars - Salva a la rebelión y El Cubo en Barcelona, eran bajas.

Quizás por esto, o por otras mil variables que el cosmos haya planeado alinear en el lugar y momento más adecuados, la Space Wars de It's a Trap Studio resulta una agradable sorpresa. Y es que tras su desafortunada carencia de una inmersión que permita al jugador meterse en vereda desde el primer minuto, la marca francesa sabe jugar con la temática de la manera más correcta. Sin grandes artimañas ni escenas explosivas o acción desenfrenada -que vendría ser lo que uno esperaría- se las apañan para conseguir algo razonablemente improbable: encajonar una sala de corte clásico y enigmas de diseño tradicional dentro de una ambientación bien acomodada a la esencia de la saga espacial por antonomasia.

Dejando de lado una un tanto dañina prueba en concreto a los pocos minutos de empezar, que aburre y descoloca por repetitiva y tediosa, los juegos se suceden con gracia y la práctica sencillez de lo clásico, cumpliendo con creces gracias a su ameno diseño y su rápido y afortunado desarrollo, bien implementados en unos decorados competentes y más que acertados -por los que muchos suspiraríamos en nuestro país, a sabiendas de la temática-, gracias a los que el escuadrón rebelde de marras difícilmente se sentirá un solo instante fuera de lugar, mientras reconoce lugares y personajes como fenomenales guiños intergalácticos que harán regurgitar de emoción a los más acérrimos fans.

Esta placentera sensación que acompaña a los jugadores a lo largo de la partida, y que verdaderamente sirve para alienarlos del mundo exterior y trasladarlos a la velocidad de la luz a un lugar muy, muy lejano, viene acondicionada por la implementación de una trama sencilla y perfectamente plausible dentro de los cánones de la saga, que bien podría servir de historia paralela al Episodio IV o Rogue One, y cuya esencia -especialmente la propia de la trilogía original- es respirable en cada estancia, cada vez que una puerta se abre o un mecanismo se activa.

Una sala hecha por fans y para fans que, en contra de toda expectativa, sorprenderá a entendidos y neófitos por el entretenimiento que propone y por su astucia a la hora de recrear la esencia Star Wars.